martes, 11 de marzo de 2008

"Especiales"

Soy un gran aficionado a la música, es más, creo que de alguna manera, gracias a la música, el hombre, se puede vanagloriar de ser un poco más, el rey de la creación. Sonidos y sones son fáciles de conseguir, pero la melodía, el verso sonoro, la envoltura que algunas veces es capaz de rodear el alma, adquiriéndola únicamente a través de uno de nuestros sentidos, está reservada a seres superiores. Tranquilos, no voy a hacer un alegato contra el “Chiki Chiki”, el circo titiritero, también tiene derecho a existir. Pero la música… ¿que seria del ser humano sin ella?, ¿seria todo igual?, ¿habríamos llegado, al nivel cultural que disfrutamos hoy, sin ella?. Sin duda, no.


Obviamente, como pasa con el resto del arte, no todos tenemos la misma percepción de la obra que admiramos. Los que se emocionan con el flamenco pop, o el rap, muy raras veces pueden hacerlo con Mozart, o Astor Piazzolla y viceversa. Esto me lleva a pensar, que la apreciación musical, tiene fuertes vínculos con el nivel cultural de la persona, pero extenderme en este concepto, aparte de llevar a pensar al lector, que soy un clasista intelectual, me llevaría varios folios, que ni quiero, ni debo llenar.


Bien, como decía al principio, soy un gran aficionado a la música, en el disco duro de mi ordenador tengo varios miles, de mp3, seleccionados por mi, y que escucho habitualmente mientras realizo distintas labores en él, (ahora mismo estoy escuchando el piano de Bill Evans, interpretando "Waltz for Debby"). Los tengo todos, perfectamente, clasificados, según el tipo de música de que se trate, Blues, Clásico, Jazz, Rock, Tango... etc. Y dentro de esta clasificación otra más, que distingue el subgénero, dentro de la familia a la que pertenece. Por ejemplo en Jazz, tengo, Avant Garde, Big Band, Bob, Cool, Crossover... etc. Así hasta unos 20 subgéneros más.


Solo hay una carpeta, que un musicólogo, no seria capaz de identificar, esta se llama “Especiales”, para incluir un mp3 en esta carpeta, solo hace falta, al tema de que se trate, conseguir emocionarme, situarme al borde de la lagrima, y lograr ponerme el vello de punta, pero esto corresponde más a un sentimiento espiritual, que al ámbito musical, propiamente dicho.


1 comentario:

  1. Hola Jesús. En primer lugar, enhorabuena por tu blog, está muy bien. También debo darte las gracias ya que he podido descubrir una película, "Disparando a perros", bastante durilla, en la que muestra el cinismo de toda una sociedad "desarrollada" ante el genocidio en Ruanda. He de decir que sobre este tema no tenía mucha idea, fue en el 94 (y todavía era demasiado pequeño para darme cuenta), aunque recordaba que hubo problemas por allí.

    Gracias por descubrirme esta realidad, no tan lejana en el tiempo, que parece estar olvidaba por la Comunidad Internacional.

    Un saludo, y espero alguna otra crónica de cine.

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